Este 8M que el mundo conmemora el Día Internacional de la Mujer, personajes como Ada Lovelace cobran relevancia tratándose de una fecha en la que las Naciones Unidas decide poner en la agenda la temática "Por un mundo digital inclusivo: Innovación y tecnología para la igualdad de género".
Pero, ¿Quién fue Ada Lovelace?, fue una persona adelantada a su época y extraordinariamente talentosa, que con sus aportes marcó precedentes dentro de la informática, además de ser la encargada de revolucionar completamente el mundo de la informática en una era donde la mujer no tenía presencia en la tecnología.
Considerada desde ese momento como madre de la programación informática, y aunque te parezca increíble comenzó a firmar sus trabajos con las iniciales A.A.L., por miedo a que estos fueran censurados o subestimados por tratarse de una mujer.
¿Por qué recuerdo esta historia? Ada Lovelace es una de miles y miles de mujeres cuyo talento ha hecho posible el avance tecnológico, sin imaginarlo, sus aportes fueron vitales para el empoderamiento de la mujer en la innovación digital. Como ella, muchas otras estuvieron detrás de la creación de las primeras grandes computadoras, softwares y herramientas que nos permitieron conocer el ciberespacio tal como lo vemos hoy.
Retomando la conmemoración establecida por la ONU, podemos entender que el propósito desde este momento es rendir homenaje a las mujeres y las niñas y a las organizaciones de mujeres y feministas que luchan por el avance de la tecnología transformadora y por el acceso a la educación digital. Agregando en la agenda actual la prioridad por explorar los efectos de la brecha digital de género en el crecimiento de las desigualdades sociales y económicas y poner en relieve la importancia de proteger los derechos de las mujeres y las niñas en los espacios digitales.
Por experiencia propia conozco las limitaciones existentes, pero también sé lo determinadas, persistentes y resistentes que podemos ser las mujeres a la hora de hacer escuchar nuestras ideas, conocimientos y desarrollar nuestros talentos. No hay duda que tenemos una capacidad increíble para convertir la tecnología en una herramienta transformadora, lo compruebo a diario desde las diferentes áreas en las que me desenvuelvo.
Detrás de la revolución digital han existido y siguen existiendo rostros femeninos dispuestos a poner en práctica nuevas habilidades y a derribar esa brecha que intenta dejarlas atrás. En el siglo XXI también somos muchas las que a través de la educación queremos empoderar a mujeres y niñas para que se conviertan en futuras emprendedoras tecnológicas y ayuden a sus comunidades.
Es por esto, que me siento con el deber de conmemorar este 8M con una misión: ¡Sumarme a esa iniciativa global de promover el desarrollo de una educación digital e inclusiva para un futuro sostenible!.
No sé qué nos depara el futuro, no sé cuántas nuevas causas se sumarán a la lucha cada 8M ni los nuevos obstáculos que tendremos que enfrentar, pero tengo la certeza que todas podemos sumar al cambio. No lo olvidemos, la innovación digital también es cosa de mujeres.